URANO EN ARIES LA ENERGÍA DEL CAMBIO
Por Alan de Los Mares
Desde Bogotá Colombia
El pasado 29 de
Mayo el escritor peruano Mario Vargas
Llosa y su esposa, Patricia Llosa, celebraban bulliciosamente en un lujoso
apartamento de su propiedad en el exclusivo sector de Manhattan, en New York
City, reunidos con toda su familia (hijos, nietos, y demás consanguíneos) sus
bodas de oro matrimoniales. Vargas y Patricia se habían casado el 29/5/1965, y
eran aparentemente una pareja estable y sólida. Jústamente, durante la animada
reunión, una de las nietas de la pareja, María Josefina Vargas Llosa, hija de
su Hijo Gonzalo, decía en un improvisado discurso: “Estamos muy orgullosos de
ustedes. Estamos muy felices por ustedes. Imagino que llegar a los 50 años de
casados es muy difícil, hoy en día casi nadie llega”.
Veamos la gráfica de
la carta natal del escritor con los respectivos tránsitos de ese 29/5/1965, en
busca de pistas de tan notable longevidad matrimonial, teniendo en cuenta la
inveterada tendencia de ‘Varguitas’ a
las aventuras sexuales e infidelidades conyugales.
La explicación es que Marito es Ascendente Capricornio, y
para esa fecha Saturno en tránsito de retorno (Casa II) pasa de cuerpo (0°42’ de orbe)
sobre su posición radical en Piscis, y cuando eso sucede, obliga al individuo a asumir compromisos con seriedad, responsabilidad y madurez, fundamento de todo proyecto sólido y duradero; lo hacía asimismo en conjunción a Venus Rx, señora de V (amor,
romance), planeta que cruzaba “casualmente” Géminis en ese sector (la boda se
efectuó en una fecha bajo la regencia de este signo), al igual que tambien pasaba por esta mansión su Sol ariano (su domicilio natural), en sextil a su punto radical; el sol
todo lo hace luminoso y brillante, así que una muy buena y favorable
oportunidad presentaban los astros en el cielo para el amor, y para concretar
(Saturno) una relación de pareja (Venus) con posibilidades de una larga y estable (Saturno) vida matrimonial
Pero –todo tiene su
pero-, en conjunción partil con el Ascendente también hacía su paso por
Capricornio la Luna Negra, y aunque ha sido un matrimonio bastante longevo
(Saturno), con toda seguridad Patricia Llosa habrá tenido que padecer (Lilith y
las pasiones…) largos años de infelicidad y frustración, ocasionados por las
constantes aventuras extramatrimoniales e infidelidades (Lilith) de su
“ejemplar” consorte, y aquí es pertinente poner el tema en contexto, tanto
astrológica como biográficamente.
“En mayo de 1955, se
encuentra con su tía política Julia Urquidi Illanes (hermana de Olga Urquidi,
esposa del tío Lucho Llosa, que era hermano de la madre de Mario), y poco después
entabla con ella una relación amorosa. La censura familiar a la relación hace
que ambos decidan casarse. En esos tiempos la ley peruana no permitía casarse a
menores de 21 años: Mario tenía entonces diecinueve y Julia era diez años mayor
(Julia, según indica en su libro Lo que Varguitas no dijo, nació en mayo de
1926. Por su parte, Mario, en sus propias memorias, dice que Julia era doce
años mayor, y no diez.). Tras falsificar la partida de nacimiento de Mario, se
casaron furtivamente en Chincha, en mayo de 1955, después de muchas aventuras
contadas en su novela La tía Julia y el escribidor —donde lo verídico se mezcla
con la ficción— y en sus memorias El pez en el agua —donde trata de contar la
verdad, según sus recuerdos—. Fue una boda por la que el padre, al enterarse,
prometió "matar" a su hijo”.
Tras algunos años de
matrimonio con la Tía Julia –que así se llama también el personaje en su novela
“La Tía Julia y el Escribidor”, se divorcian en el año 1964, a causa de una
relación de infidelidad que mantuvo Mario a escondidas en Paris con
la sobrina de Julia, Patricia Urquidi, hija del Tío Luis Llosa y luego contrae
segundas nupcias con ésta.
En su mapa natal, la
Luna Negra aparece en el signo de Libra, Casa IX, indicando una oscura
fascinación (Lilith) por relaciones de pareja (Libra) tan aberrantes y
transgresoras (Lilith), como el incesto, por ejemplo, lo que desde luego
refleja tambien –en ese sentido- un vacío, una ausencia total (Lilith) de
principios morales (Casa IX). Para la muestra esta original manera de dar por terminado su matrimonio, asistiendo previamente con bombos y platillos a sus bodas de oro, lo que es una muestra no sólo de cinismo, sino de total falta de escrúpulos.
“La historia sentimental del ensayista de 79
años es un verdadero culebrón. Las dos mujeres de su vida, hasta ahora, fueron
y son parte de su familia más cercana. El enamoramiento de Julia, su tía
política por línea materna, provocó un verdadero cataclismo en su entorno más
cercano (el rechazo Lilithiano). Mario tenía apenas 18 años y la mujer que le
quitaba el sueño tenía 11 más. A pesar de las reticencias y las consecuencias,
Vargas Llosa plantó cara a sus padres y se casó con ella. Urquidi, fallecida en
2010 a los 84 años, llegó a escribir la réplica a La tía Julia y el escribidor
-una de las principales obras de juventud del autor -, Lo que Varguitas no dijo
(1983), en la que relataba la cara oculta de esa idílica historia de amor que
aparece en el libro, incluida la fuga para casarse y las razones de su
divorcio.”
“Algunos de sus
coetáneos y biógrafos cuentan que fue ella (Julia) la que puso fin a la
relación ante los constantes coqueteos de su joven esposo, mientras que otros
aseguran que fue él quien quedó prendado de su prima hermana y rompió el
matrimonio (Lilith y el abandono). Una vez más, el joven prodigio de las letras
ponía patas arriba a la familia, con un casamiento que trajo muchos quebraderos
de cabeza a los padres de los contrayentes. Los que conocen a Patricia
coinciden en su fuerte carácter y en sus férreas convicciones, alabadas por su
marido en numerosas ocasiones. A pesar del consabido riesgo para la salud de
sus futuros vástagos, la endogamia no fue un obstáculo para la pareja, y fruto
de su amor nacieron sus tres hijos: Álvaro, Gonzalo y Morgana, los dos primeros
formados en Cambridge y la más joven, en Ascott.”
Volviendo al día de la
celebración de esas bodas de oro, en ese espléndido atardecer neoyorkino, el
Sol –irónica y “casualmente”- transitaba (como el día del matrimonio) la Casa
5ª de la figura celeste natal del premio Nobel inca, asociada al amor, el romance, las
fiestas y celebraciones, y lo hacía en compañía de Marte (regente del signo
solar de Vargas), dios de la guerra y los conflictos, señor de IV (hogar,
familia), que viene precisamente de esa mansión, y de Mercurio, el chismoso de
las noticias de periódicos y revistas, que viene de III (medios de
comunicación), los tres personajes en conjunción a Kirón Rx (heridas), y vaya noticia inesperada y sorpresiva la que nos transmitían los medios de comunicación unos
días después, la ruptura
matrimonial, la separación, de esta original
pareja (fruto del incesto).
Astrológicamente ¿qué
influencia planetaria podría ser la indicadora de semejante acontecimiento repentino que acaba de romper la unidad familiar y el hogar de los Vargas Llosa ?
He allí al pillo,
Urano en Aries (signo solar de Vargas), el de los cambios, lo nuevo, las
rupturas y la libertad, la independencia, lo sorpresivo e inesperado,
transitando la Casa III (noticias), y en conjunción (2°23’ de orbe) al IC (hogar, familia). Urano es regente
de II, VIII de VII ( muerte de la pareja
o de las relaciones de pareja), y viene de IV precisamente. Una enorme energía
de cambio lo impulsa irresistiblemente a buscar nuevos (Urano) horizontes en
cuanto a las relaciones de pareja (el tránsito de Urano forma trígono con el de
Júpiter en VII).
Veamos estas citas:
“Solo cinco días
después de celebrar sus bodas de oro con Patricia Llosa Urquidi, Mario Vargas
Llosa anuncia a su familia que quiere separarse. Tras la inesperada (Urano) confesión, el premio Nobel de Literatura coge un
avión rumbo a Madrid. Al llegar a la capital, abandona el hogar conyugal (Urano
conjunto a IC, los cambios de
domicilo) y se instala en un apartamento del Hotel Eurobuilding. El 10 de
junio, la revista «¡Hola!» revela la relación del literato con Isabel Preysler,
dando por hecho que Vargas Llosa ya estaba separado de su mujer. Sumidos en la incredulidad (Urano, lo increíble) y el
dolor, Patricia y sus tres hijos, Álvaro, Gonzalo y Morgana (es decir, la familia, Casa IV) emiten un comunicado en el que confiesan estar
«sorprendidos (Urano) y muy
apenados» por la noticia (Urano aún está en III) publicada en la revista del
corazón. Hasta entonces, nadie de la familia sabía que el autor de obras
maestras como «Pantaleón y las visitadoras» o «La fiesta del Chivo» mantenía un
«affaire» con la «reina» del papel couché.
Ha transcurrido casi
un mes de aquel día y la familia Vargas Llosa (Casa IV) todavía no logra salir
de su estupor (Urano). La sensación
de desconcierto se mezcla con otros sentimientos: tristeza (por el hogar roto)”.
Hogar (Casa IV) roto
(Urano)…..
Pero sigamos el
recorrido noticioso del suceso:
“Gran sorpresa (Urano) generó la portada de la revista
‘¡HOLA!’ en donde aparece el escritor peruano Mario Vargas Llosa junto a Isabel
Preysler, hecho que desencadenó que su esposa, Patricia Llosa de Vargas,
emitiera un comunicado asegurando que tanto ella como sus hijos están
“apenados” con la noticia difundida en Madrid”.
“Tras la publicación
de la revista ‘¡HOLA!’, mediante la cuenta en Twitter de Morgana Vargas Llosa,
hija del escritor, se difundió un comunicado de prensa escrito por Patricia
Llosa de Vargas con fecha de hoy y publicado desde Madrid.
“Mis hijos y yo estamos sorprendidos (Urano) y muy apenados por las fotos que
han aparecido hoy en una revista del corazón. Hace apenas una semana estuvimos
con toda la familia en Nueva York celebrando nuestros 50 años de casados y la
entrega del doctorado de la Universidad de Princeton. Les rogamos respetar
nuestra privacidad”.
Ahora bien, ese 29 de
Mayo pasado, mientras toda la familia celebraba feliz esas bodas de oro, al
parecer el que no se sentía muy cómodo con todo ello era Don Mario, que estaba
próximo a tomar su inesperada y sorpresiva (Urano) decisión, a instancias de esa nueva (Urano) pasión (Lilith), como lo deja entrever el quincucio
entre Urano celeste y el tránsito de Lilith, pasión surgida talvez meses atrás con
una hija de Urano, precisamente, vaya casualidad!!, pues Isabel Preysler nacio
el 18/2/de 1951, en Manila, Filipinas, y por tanto de signo Acuario (Urano)...
A propósito de ello,
dice el mismo Mario Vargas Llosa a la ahora ex mujer suya: “No es una aventura
como otras veces, Patricia, ahora es de verdad, y en cuanto llegue a Madrid,
dejo nuestra casa”
“Yo he cumplido, ahora
me toca ser feliz. No me queda mucho tiempo”, habría sido lo último que dijo el
novelista anunciando su separación.
Tamara Falcó, hija de
la Preysler opina con relación al romance de su madre con el premio Nobel:
“La veo muy bien. Ha
sido una madre ejemplar, una mujer ejemplar y merece ser feliz. Conozco a Mario
desde hace tiempo y les veo encantados el uno con el otro”.
Encantados el uno con
el otro… Si hojeamos una vez más la gráfica con los tránsitos de ese 4/6/2015
cuando se hace oficial la ruptura del matrimonio, Lilith transita en conjunción
a Neptuno Rx, Casa IX, lo que explica el tal encanto, el hechizo de que ha sido
víctima ‘Varguitas’ por parte de esta ya no tan bella extranjera Isabel Preysler… y eso que Marito dice que no
es una aventura más, que ahora es de verdad,
como si las cosas con Lilith y Neptuno pueden ser reales…
El tránsito del Nodo
Norte en IX (Libra) hace conjunción a Lilith Rx, abriéndole las puertas, en el
futuro próximo, a esta apasionada (Lilith) relación de pareja con esta dama extranjera (Mario dice que está locamente enamorado, ya lo creo!); Ahora, la
cabeza del dragón viene de XII (lo oculto, lo clandestino).
“Lo de mi padre con Isabel Preysler es una
relación (Libra) nacida de una infidelidad (Lilith)”, lo cual ha sido una
constante en la vida del escritor, dice su hijo Gonzalo, talvez interpretando
–sin saber de astrología- esa posición de Lilith en Libra en su tema natal.
—¿Le parece extraño (Urano) ver a su padre en estas últimas
semanas moviéndose en un escenario muy distinto al que estamos acostumbrados a
verlo, que es el académico y literario? Después de todo estamos hablando de un
Nobel reconvertido en el personaje más deseado de la prensa rosa...
Se lo tenía bien
guardado el señor Pantaleón y sus
visitadoras, y al final es víctima de lo que él tanto critica –y de lo cual es
parte-:
“La banalización
creciente del arte y la literatura, la pérdida de valores estéticos, el triunfo
del sensacionalismo en los medios de comunicación, la frivolidad política y la
obsesión por convertir todo en diversión son ejemplos de la degradación que
aqueja a la sociedad, así lo subraya el escritor peruano, Mario Vargas Llosa en
su nuevo ensayo, ‘La civilización del espectáculo’, que el autor presentará
este 25 de abril en la Casa de América, de Madrid.
La cultura, el
periodismo y la política están en decadencia, afirma el Premio Nobel de
Literatura, quien pronostica la desaparición de la cultura e insiste en que
sería una tragedia si la cultura acaba solo en entretenimiento. Querer
divertirse “es legítimo -dice- pero si lo convertimos en un valor supremo
tendrá sus consecuencias”.
El progreso de la
civilización del espectáculo ha atado las manos a los intelectuales, afirma
Vargas Llosa, sin embargo no cree que por ejemplo “la moda pueda reemplazar a
la filosofía, a la literatura, a la música culta como un referente cultural”,
critica el gran espacio que se les dedica en la actualidad a la cocina y a la
moda en las secciones de cultura, reprochando esa idea de que los chefs y los
modistos tengan ahora “el protagonismo que antes tenían los científicos, los
compositores y los filósofos”, no obstante se considera optimista al creer que
en el mundo moderno las cosas pueden cambiar para mejor.”
En cuanto a Patricita,
por haberse casado con su consanguíneo cuando éste gozaba (sí, gozaba) del
tránsito de Lilith por su ascendente
natal, ahora sufre en carne propia la tristeza y la infelicidad del abandono y la infidelidad de
su marido, tal como debió ocurrir con la tía Julia en aquellos días. La Luna
Negra al final conduce inevitablemente al fracaso…
Finamente, me quedan
sonando estas enigmáticas palabras de Vargas Llosa a Patricia:
“Yo he cumplido, ahora
me toca ser feliz. No me queda mucho tiempo”.
El transito de la Cola
del Dragón en III está en conjunción exacta al
Sol Rx, regente de VIII, y opuesto a doña Lilith en IX. El Nodo Sur
viene de VI…
Muchas cosas
personales del pasado están quedando atrás (Nodo Sur), pero el futuro (Cabeza
del Dragón) conjunto a Lilith aparece al lado de una sombra oscura….
Post a Comment