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EL VERDADERO CRISTIANISMO



En el inicio de la Semana Mayor, presentamos una síntesis de extraordinario valor sobre las principales sectas y doctrinas gnósticas –aquellos verdaderos cristianos de los primeros siglos, acusados de herejía por la iglesia “oficial”- en la pluma del sabio maestro Arnold Krumm Heller, obispo de la Iglesia Gnóstica
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Nos encontramos, en primer lugar, con los Naasenos, quienes tuvieron una considerable importancia en los primeros siglos de nuestra Era. Adoraban a la serpiente, y este fue el motivo que se los declarase heréticos. Pero confiesen honradamente los historiadores, que fue una agrupación de gentes muy versadas en las ciencias y que poseyeron grandes e intachables virtudes. Lo único que pudo ser reprochable en ellos, fue la adoración a los nahas (serpientes) y la creencia que sostenían de que el líquido de estos animales, en su mayor parte venenoso, pudiera servir para redimir a los hombres de la esclavitud del pecado. En griego, serpiente es ophis. Por eso los naasenos griegos se llamaron ophitas. Sus enseñanzas fueron tomadas de santo Tomás y del Evangelio de los Egipcios. 

En los escritos de los naasenos, se describe al hombre de triple naturaleza. Un aspecto andrógino, al que daban el nombre de adamas, quien a su vez era el padre de los aeones, que más tarde se convertían de girones, formándose así el Trío de cuerpo, alma y espíritu... Todos estos principios, dentro de un perfeccionamiento absoluto, convergen en cristo. Dice santo Tomás, que este cristo se encuentra en el semen que los niños tienen escondido hasta la edad de siete años y que luego se manifiesta a los catorce. Explica, así mismo, que el aura, se satura de este jugo...

Reconocían al demiurgo como entidad encargada de crear los mundos o, por lo menos, de nuestro mundo. Eran soberbios astrólogos y ponían en relación con los siete planetas y los siete signos del zodíaco, siete centros internos de nuestro organismo... La forma de su culto, la tomaron los griegos de los egipcios, quienes presentaban a Hermes provisto de un miembro masculino en estado de erección, al que daban el título de dador de la razón...

Empédocles, dice que los seres humanos fueron traídos a este mundo de Adán, para que sirvieran al número, al dios Jaldabaoth con una vara en la mano, en la que florece una ROSA, atributo el cual, al aproximarse a los hombres, los hacía dormir o los despertaba, según era el deseo del dios. Cuenta Homero, asimismo, que el miembro viril con esta figura era cuando tenía mayor poder sobre la vida y la muerte, pero para tratar con él era forzoso llevar un látigo para dominarlo.

Esto nos recuerda a Nietzsche, cuando dice: Si vais donde la mujer, no olvidéis el látigo...

Esta frase, le ha costado muchas protestas del sexo débil, y, sin embargo, Nietzsche, más que nadie, supo respetar y adorar a la Mujer. Quien lea esta frase y la interprete a la letra, no la conoce....

En el acto sexual debe separarse a Dios de la bestia, al ángel del macho bravío. La voluptuosidad carnal ha sido la que más ha denigrado al Hombre, y hay que tener en cuenta que en ese momento, en un éxtasis de amor, debe confundirse con la Fémina. Los que no saben dominarse y poner esto en práctica, necesitan de ese látigo que aconseja tan preeminente filósofo...  

La reencarnación aceptada por los naasenos, estaba representada por las altas y bajas mareas. Decían aquellas antiguas escrituras: Todos vosotros seréis dioses si salís de Egipto y pasáis el mar rojo....

Las descripciones del antiguo testamento eran altamente interpretada por ellos, y entonces el paso del pueblo de Israel por el jordán era simbólico y explicaba la evolución sistemática dentro de nosotros.

Conocían el poder de los mantrams y la dominación de la Tríada humana era empleada en la magia sacra. Kawlakaw − Sawlasaw − Zeesar, era pronunciado secretamente. Kawlakaw era el hombre superior, Sawlasaw, el interior, y Zeesar el mediador o cristo redentor.....

Tenían como objeto sagrado o símbolo, un CÁLIZ. En el tomaban el semen de Benjamín. Decían que ese semen era compuesto de Vino y Agua. Celebraban la unción eucarística, especie de misa católica actual, y en ella colocaban diversos símbolos entre los que había una serpiente alada a semejanza de los mayas de Yucatán y tal como se observa en san Juan de Teotihuacán...

 Vienen a continuación los peratas, o peraticenos. La denominación de peratas viene de perasai, pues así se llamaron los que constituyeron aquella Religión, quienes afirmaban que eran los únicos que podían pasar a través de la corrupción de la época. Eran, con toda firmeza, de una alta moral y conocían los grandes secretos de la naturaleza.

Dividían el mundo como los naasenos, en un trío. La primera parte de esta tríada era la PERFECCION o Dios−Causa. La segunda era el mundo astral, y la tercera, el mundo físico o visible. Tenían tres verbos y tres mentes. Desde el mundo superior, era esparcida toda semilla para que fructificara en el mundo visible; y entre el padre−Causa y el Mundo manifestado, había un mediador, el crestos, sin cuyo auxilio era imposible llegar a la perfección ...

La serpiente o el órgano sexual, figuraba como símbolo principal en el culto de los peratas. En uno de sus libros, hablan de cristo, a quien consideraban como un nirvanacaya que vino voluntariamente a ser encarnado para salvar denodadamente a la UNIDAD... es decir, para unir la tríada dispersa. Dice en uno de sus pasajes: Soy la huanguadia que viene a despertar la fuerza que está en el espacio, que está en los más inmundo: Soy lo que en el mar es masculino y femenino y que tiene doce aberturas para tocar la flauta. Mi nombre es Chorzar. Está en la ignorancia, pero tiene una pirámide de cinco ángulos que se llaman OU, AOAI, OUO, OUOAB, y KORE, que representan todo el conjunto... Cantan a la belleza y dicen que su secreto está en lo masculino−femenino, que, aprovechado debidamente, nos mantiene siempre jóvenes.

Afirmaban también los peratas, que existían dos formas de Nacimientos. La de la carne, originada por el coito, y otra distinta para lo que aquél no era preciso. De la primera, salían hombres condenados a la muerte, y de la segunda, de la concepción del Espíritu Santo, ángeles. Que nuestro deber era evitar la concepción carnal y lograr la espiritual. Al paso de un estado a otro le llamaban el paso del pueblo de Israel por el Mar Rojo... Dentro de su simbolismo religioso juega un gran papel el hecho de que Moisés en el desierto mostrara a su pueblo la serpiente sobre una vara, diciendo que el que se aprovechara esa serpiente no sería dañando durante el trayecto. El poder, la fuerza que acompañaba a Moisés en su peregrinaje, fue la serpiente sobre la vara, que luego se convirtió en la vara misma. Ella fue la que devoró a las demás serpientes y la que habló a Eva...

En cuanto a la trinidad, el Padre−Dios en un extremo y la materia en otro, no pueden ser entrelazados sino por cristo como nexo de unión. Pero el cristo nada puede hacer sin el auxilio de la serpiente, ya que la fuerza y el poder sólo residen en ella. 

En sus misterios encontramos pura fisiología. El padre es la cabeza, el cerebro increado. En su base y en el extremo opuesto, la materia, el organismo duro concebido por la carne.

 En el medio, el liquido, el semen, creado por si mismo. Tenemos, después a los setianos.

Esta secta rendía culto a la sabiduría divina, y fueron, indudablemente, los primeros teósofos. Decían que Set era hijo de la sabiduría. Su tríada estaba representada por Set, Caín, y Abel, siendo Caín la carne y Abel el mediador. En cambio Set, era el Dios− Sabiduría. Afirmaban que cristo y Set eran lo mismo puesto que ambos eran hijos de la sabiduría.

Al encontrarse el sarcófago de Set, la iglesia católica escondió el Libro de los Muertos en el Vaticano, perdiéndose con él multitud de enseñanzas de inestimable valor. 

Los Setianos adoraban la GRAN LUZ, decían que el Sol, en sus emanaciones, era substancia divina, la cual formaba nido en nosotros y constituye la serpiente. Que el hombre sólo debería temer la oscuridad, que ella representa, o sea el infierno, ya que la luz esta aprisionada por esta oscuridad misma y trata de liberarse de ella. Esta oscuridad está contenida en el útero y debe venir el gran viento, el gran hálito para libertarla. En los misterios se representaba la luz por un Anciano y la oscuridad por una mujer joven y hermosa, y los poetas setianos, en sus odas cantaban esa persecución...

Hay un libro sagrado entre estos iniciados, que se llamaba el Discurso de Set. 

Naasenos y setianos tenían enseñanzas absolutamente idénticas a la teosofía moderna, y es lástima que la maestra Blavatzky no hubiese dado con los tesoros gnósticos. De haber sido así, su labor habría sido otra muy distinta sin necesidad de importar cosas mantenidas por el oriente. Sin embargo, es posible que esto haya sido una conveniencia, porque, de lo contrario, la misma iglesia católica de aquellos tiempos la hubiera hecho enmudecer.

Pero hoy nosotros no debemos conformarnos con la teosofía oriental, sino que tenemos el sagrado deber de volver los ojos hacia nuestro cristianismo esotérico, tal como lo venimos predicando hace 25 años.

Más tarde vino Justino, formando la escuela de los justinianos.

Nunca la iglesia ha hecho mas falsificaciones que con las obras de Justino, quien, habiendo sido discípulo directo de los apóstoles, formó una grey y luego murió mártir. Como gnóstico, la iglesia quemó sus verdaderas obras y reformó otras substituyendo nombres. Por eso hoy podemos decir que tenemos dos Justinos; el verdadero y el falsificado por los católicos.

Justino solicitaba a sus discípulos, un Juramento tremendo en el que se obligaban a no revelar Jamás cuanto les era enseñado sobre los GRANDES MISTERIOS. El fue el autor del Apocalipsis BARUC, que dista mucho de ser del que actualmente se conoce. El verdadero está en poder de varias sociedades secretas (*). En este Libro repite un cuento de Herodoto, en cuyo simbolismo afirma que está el misterio de la creación. Es como sigue:

Hércules se hallaba de viaje, y una noche, atravesando el desierto y rendido de cansancio, hubo de dormirse. Estando en el sueño, se le fue el caballo que había montado durante este viaje; pero al despertar y hacer gestiones para encontrarlo, halló a una hermosa mujer que decía conocer su paradero. Interesado Hércules porque le dijera el lugar donde se encontraba, está le respondió que sus labios no pronunciarían palabra entre tanto no consintiera que ella fuera su amante y se realizara el coito. Trató Hércules de repudiarla porque sólo su parte superior era de mujer hermosa. Los miembros inferiores pertenecían a una horrorosa serpiente. Pero con tal de que le fuera devuelto su caballo, accedió. Esta mujer serpiente concibió de Hércules, y de ese connubio salieron tres personas en una. Una figura de mujer dividida en tres partes: mitad de cuerpo humano; mitad de serpiente, y en el medio la parte sexual de ambos. De aquí salió la trinidad.

En esta obra el pueblo de Israel no es una simple tribu, sino un símbolo del mal, de la parte femenina...Habla también de los doce ángeles buenos y de los doce malos. Según Justino, BARUC fue el ángel que encontrando a Jesús, lo inició en los sagrados misterios. Justino fue un de los más grandes iniciados y su fama llegó a ser universal. No pudiendo la iglesia, por este motivo, dejar de explotar su nombre, guardó sus verdaderos libros, dándole su paternidad a otros bien distintos que jamás pensó escribir...  

Tenemos también a Simón el mago. Este fue contemporáneo de Justino y alabado por éste último. Hoy la iglesia dice, naturalmente, que Justino se equivocó con respecto a él. El hecho es que los romanos le erigieron estatuas con la inscripción de SIMONI DEO SANCTO. Logró tal desarrollo de sus facultades internas, que pudo operar fácilmente verdaderos milagros, y aún cuentan que tuvo una controversia con san Pedro en la que éste afirmó que las cosas de Dios no se adquirían con dinero.... Por lo visto, la iglesia corrigió esta frase del primer pontífice, y hoy el Papa ofrece y entrega muchas de estas cosas mediante una buena retribución....

 Simón el Mago cree en el poder oculto de fuego y asegura que la íntima esencia de este elemento encierra un inmenso poder del cual debe valerse el mago, indudablemente. Ese fuego lo encuentra también dentro de nosotros, con la transmutación de las fuerzas sexuales....

(*)Nosotros lo tenemos para los estudiante avanzados. Es el primero que en aquella época dio a conocer el septenario teosófico describiendo el manejo de la mente. Habla de los cuatro elementos, y describe el camino que emprenden las fuerzas seminales hasta llegar al corazón, y nos ha dejado infinidad de formulas recetarias y toda una magia ceremonial. Mucho de lo que ha publicado Papus, u aún otros autores acerca de la magia en los últimos años, es tomado de Simón el mago.

 En su Libro LA PREDICA dice: Para vosotros hablo en metáforas, pero debéis comprenderme....

Dos VASTAGOS de toda SERIEDAD hay en un principio sin fin. Ambos vienen de una RAIZ, o sea del PODER INFINITO, del SILENCIO INVISIBLE. Uno de los vástagos, va hacia arriba. Es el poder, el entendimiento del gran todo que a todo llega, y es masculino.

El otro, tiende hacia abajo. Es la gran mente, el productor incansable, y es femenino. En la unión de ambos está  la resolución de todo problema. El poder en sí mismo, es masculino y femenino a la vez.

Simón el Mago, predicaba el amor ideal y la obligación de combatir la voluptuosidad carnal,  luego fue víctima de la iglesia, y ésta, más tarde, lo santificó...

 Tenemos a continuación los Valentinianos. Valentín, fallecido en el año 161, fue contemporáneo de Harpócrates. Era uno de los gnósticos de más renombre y fueron muy grandes sus luchas defensivas para no ser conquistado por la Iglesia Católica, la que terminó excomulgándolo como hereje...

La herejía, sin embargo, de Valentín, consistía en tener un conocimiento más hondo y más trascendente que los sectarios de la iglesia Católica, y por sus acendradas virtudes que fue su mejor patrimonio durante toda su vida. Sus grandes poderes de mago, es lo que más eficazmente llegó a despertar los celos de sus adversarios. La literatura sobre este maestro, es naturalmente agnóstica, pues le acumulaban un sinnúmero de sofismas y de errores que nunca trató de expresar, velando con ellos su verdadera doctrina, que llegaron a ignorar por completo.

 Valentín, como casi todos los gnósticos, se valió del símil del nacimiento de un ser humano para explicar la creación de los mundos, llegando a construir todo un edificio filosófico con este sistema. Sostuvo que Jesús fue gnóstico en toda la extensión de la palabra, y por esta causa la iglesia católica no pudo interpretar las escrituras debido a que le faltaba la clave necesaria para ello. Era, además, un gran matemático y operó en su filosofía con el santo  número.

Siendo el primero que puso en práctica el sistema decimal, probablemente de él sacó la Kábala los zefirótes o diez caminos para llegar a Dios. Fue racionalista y habla de la razón como primer atributo que Dios ofrece a los hombres. A él se debe la diferencia establecida entre lo que es la ciencia y la sabiduría y, en cuanto a la existencia de la materia, es atribuida por él a un error de los nacidos por mediación de la carne.

Todo el sistema gnóstico puede ser descubierto estudiando la literatura sobre Valentín, y entonces se ve la maldad de sus enemigos de querer destruir una cosa verdaderamente santa. Respecto a la forma de transmutación de las fuerzas sexuales, sus enseñanzas son idénticas a la de los demás maestros o escuelas. Por eso no es necesario repetir; Más tarde Hipólito se ocupó en explicar el sistema de los Valentinianos probando, asimismo, que Jesús, durante los treinta años de su vida y en el tiempo que estuvo en Egipto, fue gnóstico y sus ideas terminaron por ser transfiguradas por la nueva secta que vino a construir el cristianismo.

Veamos a Marcos, quien nos dio la misa gnóstica, fue él quien con más interés cuido de la unción eucarística. Perteneció a la secta de los esenios, entre los que, ya sabemos, se prácticaba el ágape, y Jesús lo celebró con los apóstoles en casa de José de Arimatea. Pero la fórmula utilizada por Marcos difiere en parte de la nuestra y aún es más bella, aunque desde luego no es tan útil en nuestra época.

Marcos da una importancia extrema a la vocalización en la formula, y dice que toda la verdad está encerrada en el alfabeto griego. Coloca las letras de este alfabeto, sucesivamente, en la cabeza, cuello, espalda, pecho, etc., y hace pasar el líquido espermático, mediante esas fuerzas, por el cuerpo interno. Ninguno de los ocultistas modernos ha hablado con tanta franqueza y claridad de los grandes misterios como lo hizo él. Hace mención de 24 vocales − que en realidad existen y ve el Iniciado − y asegura que el nombre de cristo se compone también de esas 24 vocales para ser LOGOS, cuyo valor es la cifra 888, osea tres veces 8 o tres veces infinito.

Ofrece Marcos los mantrams precisos para evocar a los ángeles, y ciertamente producen esos efectos, como nosotros hemos podido comprobar. La iglesia tiene a buen recaudo todos los secretos dejados por Marcos y no permiten que sean conocidos porque sería su muerte completa y prepararía el florecimiento e institución de la Iglesia Gnóstica.

 La obra de Marcos merece que se haga sobre ella un libro especial. Pero en esta primera exposición no nos es posible hasta que nuestros discípulos no se encuentren mejor. Aparece luego Basílides.

Basílides, el gnóstico, le llama la iglesia gnos−católica a nuestro gran filósofo. Todos los que se han ocupados de amuletos, han plagiado a este sabio maestro cuya fórmula de consagración recibió directamente de los ángeles invisibles. Fue un gran alkimista, y hasta en el museo de Kircher, en el vaticano, se guarda un libro de siete hojas hecho de plomo por él. De aquí que los trabajos en metales que legó, hayan preocupado tanto a los arqueólogos, que hasta ahora no han podido descubrir, naturalmente, su oculto significado.  

Sus trabajos se confunden en parte con los de su hijo, el cual heredó toda la sabiduría de su padre. Basílides sostiene en sus obras que los apóstoles tenían conocimientos bastante más profundos que los que dejaron expresos en sus escritos, y él mismo habla bastante claro del aspecto exotérico y esotérico de las cosas de Dios con las que fue instruido por San Matías, dándole a conocer la parte secreta de las enseñanzas de Jesús, que no paso a la iglesia católica, sino que quedó como patrimonio exclusivo de los gnósticos.

 Las ideas expuestas por Basílides son difíciles de comprender. Sobre todo cuando habla de la gran nada y de la creación de la semilla.

La reencarnación y el karma, están mucho mejor explicados por Basílides que por los indúes. Nuestro patriarca ha tomado su nombre como apodo iniciático, y con su inmenso saber parece comprenderlo mejor que la mayor parte de sus discípulos.

Saturnino de Antioquía. Fue el gnóstico que mejor llegó a conocer el Zend Avesta, constituyéndose en un cabalista profundo. Ya el Maestro Encausse (Papus), cuando estudiábamos con él nos confeso que la mayor parte de sus fórmulas las había tomado de Saturnino.

Aseguraba dentro de sus enseñanzas, que el Jahve, dios de los Judíos, era uno de los ángeles caídos, quien pudo llamar a su pueblo, por sus conocimientos, el pueblo predilecto... Pero la suprema causa, el principio desconocido, el gran Dios, no pudo reconocer esa diferencia que se apartaba de la verdadera justicia y verdadera equidad con que él abraza a todos los pueblos de la tierra.

Los saturninos eran sobrios, muy castos y estrictamente vegetarianos, llevando sus normas de moral a extremos inconcebibles. Para comprender a Saturnino, en toda la extensión de sus enseñanzas, es preciso haber estudiado previamente a sus antecesores.

Marción de Ponto. Era hijo de uno de los primeros obispos de la iglesia católica. Siendo amigo muy intimo de Cerdón, tuvo que luchar con él denodadamente en Roma, a fin de que los sectarios cristianos regresaran a la verdadera iglesia cristiana para mantener siempre incólumes los principios inmortales del gnosticismo, pero el egoísmo e intereses de la secta romana no le dio oídos y le excomulgó.

Defendía el dualismo o principio dual de todas las cosas y admitía un Dios innominado y otro manifestado en la esencia original de todo lo existente.

Carpócrates.

Era griego y por el fueron fundadas las primeras escuelas místicas del gnosticismo. 

En los primeros siglos tuvieron residencia en España muchos conventos carpocratianos, donde generalmente se recluían los Rosa Cruz para aprender y escuchar las enseñanzas del sabio maestro.

Carpócrates habla de la mónada aun más profundamente que los teósofos, y en sus predicaciones aseguraba que Jesús había desarrollado la clarividencia de tal manera que podía recordar todo lo visto y vivido por él en otros mudos y otros cielos...

Fue un verdadero mago, y en sus conventos se enseñaba la magia ceremonial...

Los gnósticos conservamos conocimientos muy trascendentes del mencionado maestro, y todas nuestras fórmulas sobre medicamentos y preparación en nuestra botánica Rosa Cruz, se deben a cuanto nos legó sobre cuestión tan importante.

El maniqueísmo, aquellos gnósticos del segundo siglo, al cual perteneció como sacerdote san Agustín, aunque la iglesia dice que sólo aparentemente, aceptaba una emanación del cielo o del sol que, realizada en la tierra, llamaban tierra lúcida, hecha por los eones del Dios. Luz es, pues, lo mismo y a la quedamos hoy el nombre de substancia de cristo, esperma o esencia del logos solar.

Uno de los continuadores de los gnósticos primitivos fueron los Albigenses. Ellos, por el siglo II también reconocían una substancia divina, de la cual todas las cosas fueron hechas.

Ya sabemos la guerra tan espantosa que se inició contra esta secta, en que el beato abad Arnoldo decía "Matad, matad a todos, que luego Dios distinguirá a los suyos". Como el teatro de acción de los Albigenses fue Cataluña, allá en los dos conventos hay mucho material que prueba la pureza de las doctrinas teosóficas de aquellos gnósticos.

Con todo lo expuesto, creemos haber hablado de los más preeminentes y significados gnósticos del primer siglo. Entre todas las obras que pueden ser consultadas para una mejor afirmación de la importancia de nuestra escuela, están algunas de Irineo, Hipólito, Epifanio, Tertuliano, Clemente de Alejandría, Orígenes, Odea Gnóstica, Bardesanes, Marco y Cerdón, que son los historiadores más salientes desde Herodoto. Aparte de éstos, figuran los escritos de los filósofos como Heráclito, Parmenides y Empédocles, los de los astrólogos y alquimistas y algunos poetas como Homero en su Odisea e Ilíada, Musaeus, Lino y Orfeo y, sobre todo, los libros apócrifos del Evangelio de Santo Tomás, Evangelio de los Egipcios y las predicas del Baruc, etc., etc.

Es curioso que en todos los libros correspondientes al gnosticismo, se advierta la lucha sostenida para lograr se conservara la antigua religión con todos sus misterios, que los nuevos cristianos no quisieron aceptar por haber caído en el materialismo que los envuelve...

Por otra parte, se observa la tenacidad con que los sectarios cristianos trataban de borrar y de extirpar las enseñanzas de los que ellos llamaban herejes; pero esto no ha sido posible a través de tantos siglos, porque las cosas santas no mueren aunque puedan quedar dormidas durante una época determinada. 

Hoy vuelven con nosotros estos estudios, y es el momento de aprender cuanto hubo de falso y de real dentro del gnosticismo. Para ellos es preciso que nuestros lectores apliquen su atención, libres de anteriores prejuicios, para darse cuenta exacta de lo que es el verdadero ESOTERISMO DE LA DOCTRINA CRISTIANA.

En todas estas enseñanzas vemos que la parte sexual ocupa un lugar preponderante, y es fácil comprender que encierra un gran misterio, misterio que hay que conocer.

En efecto, dice Krumm Heller en otra de sus obras: “Miles y miles de teósofos y ocultistas buscan la clave de la Iniciación, buscan de encontrar un secreto intimo que está escondido en todas nuestras filosofías y estudios y al que no se puede ni debe escribir. Los grandes escritores lo dejan entrever y si bien dicen que hay muchos medios de lograr en arrancarlos, yo, que tengo casi medio siglo de estudios en estos asuntos, que tengo el grado más alto de la masonería 3 – 33 – 97 – que he pertenecido a la sesión esotérica de la Sociedad Teosófica, que soy miembro de más de veinte sociedades secretas, como la O.T.O. y A.A. en los cuales tengo el último grado, que soy obispo de la Iglesia Gnóstica, consagrado con ordinal primitivo y anglicano, que como comendador de la Fraternidad RosaCruz tengo conexión con la Fraternidad Blanca, la jerarquía del invisible, que he pertenecido a la vieja guardia de Papus, Eliphas Levi, que traté personalmente a los principales ocultistas del mundo, declaro que para mí en la vocalización, en el uso de los mantrams y la oración, mediante el despertar de las secreciones sexuales, reside el único camino de llegar a la meta y todo lo demás, que no sea por aquí, es perder lastimosamente el tiempo.”

Que les aproveche a quienes estén preparados a entender esas grandes enseñanzas. Feliz Semana Santa con mucha reflexión.