LOS CRÍMENES DIABÓLICOS DE LA CASA XII. PARTE 1
El presente artículo fue publicado inicialmente El 13 de Octubre de 2011 en ADM
“con la predicción”, me decía Galo, “lograrás renombre, aunque sólo sea por los continuos e inevitables desaciertos y equivocaciones a que todo astrólogo está sometido; en cambio, ‘leyendo’ cartas, no conseguirás esto pero aprenderás muchísimo y rápido, además que tendrás la comprobación directa de la real incidencia de las energías astrales”. Verdades de Perogrullo, pero muy a menudo olvidadas o dejadas de lado presuntuosamente por quienes hacen este tipo de declaraciones. Ciertamente, hace falta en estos tiempos un nuevo Gauquelin que con todo rigor metodológico -así haya quienes con desdeño se mofen del ‘método’ en astrología-emprenda el ímprobo trabajo de confirmar o negar de manera categórica y contundente, a la luz de las estadísticas, la acción-en un sentido u otro-de estas fuerzas.
Puntualmente, con relación a la Luna negra, el de Sharon Tate es un caso bien representativo de la influencia funesta de Lilith conforme a los diversos pero correlativos significados que se le atribuyen, tal y como se desprende de la enorme cantidad de literatura (libros, artículos, ensayo,etc) sobre el tema dispersa aquí y allá. Haciendo una síntesis de todo ello, y seleccionando los conceptos y ideas que mejor definen este peligroso personaje astrológico, sobresalen con caracteres destacados en este siniestro dossier las aberraciones sexuales, el sadismo, los instintos bestiales, la animalidad, la crueldad, el infanticido, la brujería, el satanismo, el crimen ritual, rasgos inconfundibles de Lilith.
Sharon, con un embarazo de 8 meses, pendía bamboleante de una cuerda de nylon, colagada por el cuello y abierta en canal. Prácticamente le habían vaciado el vientre. Del otro extremo de la cuerda colgaba Jay Sebring, un conocido peluquero que trabajaba en EE.UU. y en Londres; tenía la cabeza cubierta con una capucha negra y tras él, en la pared, escrito con sangre, la palabra“pig”. La banda de asesinos actuó bajo las órdenes de Charles Manson, un exconvicto con un largo prontuario de experiencias delictivas a través de las drogas, el alcohol, el vandalismo, las violaciones, la prostitución, etc.
“Nació el 12 de Noviembre de 1934 en Cincinnati, Ohio. Fue en la cárcel, a lo largo de los años 50, donde tomó contacto con las virtudes del esoterismo, y algo, en su desquiciada cabeza, pareció perder el rumbo definitivamente. Durante años estudió la Biblia y cuantos textos sagrados de diferentes religiones caían en sus manos, hasta que en 1967 salió de la cárcel. En aquellos más de diez años entre rejas había concebido la loca idea de que el fin del mundo de acercaba, y creía ver señales de ello en todas partes. Pronto comenzó a considerarse como la reencarnación de Satanás e incluso de Dios.
En su esquizofrénica y descontrolada cabeza, Charles Manson creyó ver en la portada del disco de Los Beatles, Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band, y en la figura de Aleister Crowley, esa señal que esperaba”.
Decíamos que en el cielo natal de la estrella de cine observamos la presencia en XII de Júpiter (18° 24’ de Cáncer) en conjunción con Lilith (16° 46’ de Cáncer).
Lo interesante sería develar y comprender qué sentido encierra, en último término, la presencia de esa rara y extraña configuración en esta domificación tan compleja. Si como se dice, Júpiter en esta ubicación es protector-máxime que también está en conjunción con el ascendente-, ¿porqué ocurrió esta espantosa tragedia?, ¿Qué tenebroso secreto final podría ocultar sobre su vida?.
Antes de intentar especular en descubrirlo, digamos también que la XII está asociada a la gestación (recordemos que Sharon estaba embarazada), representa el seno materno, a diferencia de la V (la concepción), en que dejamos fluir nuestra energía para crear, bien sean hijos de la carne o del espíritu (nuestras obras intelectuales).
Si el ascendente marca el punto del nacimiento, la XII es la etapa previa, es decir, la vida intrauterina; Es la matriz universal, cuya contrapartida es el vientre materno; Son las aguas del caos cósmico en donde todo se encuentra en estado potencial y germinal, y de lo que todo emerge; el liquido amniótico donde nos movemos y tenemos nuestro ser antes de venir a la existencia; Es el embarazo, la preñez, reflejo de esos procesos que se desarrollan en lo oculto y secreto. Según la astrología kármica, gobierna los 7 primeros años de vida, incluida la etapa fetal.
Desafortunadamente, en el mapa natal de la actriz, aparecen Lilith y Júpiter en el maternal signo de Cáncer, y la Luna negra es contraria a la maternidad; Dada su indudable relación con lo femenino, no es casual que su tránsito por cada signo del zodiaco demore 269,3 días o 9 meses, igual a la duración del estado de gravidez, pero está ligada a una parte oscura, triste, de esta función. Son innumerables los casos en que una Luna negra en la Casa V, por ejemplo, es indicativa de abortos, cuando no de pérdida temprana de algún hijo o la imposibilidad de tenerlo. Para la fecha de los hechos se producía su retorno en conjunción exacta a su posición natal en Casa XII, activando algunas de las malas configuraciones que ya apuntaban desde el rádix a la muerte de la diva y su bebé en formación; además, por derivadas la XII es la VIII de la V, es decir, la muerte de los hijos.
Acuario en la cúspide de VIII indica muerte sorpresiva e inesperada. Venus en VIII está dispuesta por Urano en XI (grupos, amigos), y su muerte se produjo a manos de una mujer del grupo de delirantes seguidores de Manson. Susan Atkins, quien apuñaló y asesinó a Sharon era de signo Tauro (Venus); Fue una muerte violenta pues Marte en VI (asaltos, heridas, según la astrología hindú) está en quincucio con Urano, regente de VIII; Un asalto realizado por enemigos ocultos (Júpiter en XII, dispositor de Marte en VI, Sagitario). Evidéntemente, el grupo de criminales irrumpió sorpresivamente (Urano) por asalto en la residencia. Marte, a su vez, rige las armas blancas y todas las víctimas fueron heridas y acuchilladas horriblemente. La muerte en iguales circunstancias del hijo que esperaba, porque Marte regente de V (Escorpión), hijos.
Tránsitos 9/8/1969
Por Alan de los Mares
Desde Bogotá Colombia
Este parece ser el título de una película de terror y suspenso, al buen estilo de Alfred Hitchcock, y en efecto, tiene una directa relación con el mundo del celuloide. Es un historia verdadera que tuvo como protagonista a una bella actriz y modelo, quien vivió en la vida real su propio drama de horror, de esos que tanto le gustaba filmar a su marido, el director de cine Roman Polansky. Me refiero, por supuesto, a Sharon Tate, nacida el 24 de Enero de 1947 en Dallas, Texas, a las 5:47 PM, y tristemente recordada por ser la víctima más famosa de la bárbara carnicería desatada por un grupo de hippies drogadictos y desquiciados mentales a primeras horas de la madrugada del 9 de Agosto de 1969 en Los Ángeles, Ca. Sharon, en estado de preñez, fue asesinada salvájemente junto a tres amigos con quienes se encontraba reunida en esos momentos.
Pues bien, hace unos días leí un artículo en el que se afirmaba rotundamente que algunos factores astrológicos que se utilizan en la actualidad como Kirón, la Luna Negra, e incluso ciertas partes arábigas, no tienen absolutamente ninguna influencia, importancia o valor; que quienes hacen uso de ellos no son serios ni merecen la menor credibilidad. Si bien es cierto que aún son bastante confusos e imprecisos algunos de los diversos significados e influencias que se les adjudican, no es menos verdad que el planetoide y ese foco energético negativo y maligno generado por la órbita elíptica de la Luna alrededor de la Tierra en su punto de apogeo, ejercen un influjo efectivo, ya constatado por la práctica y la experiencia actual. Aquí cabe decir, apelando a una obviedad, que tiene más valor la comprobación que la afirmación. Recuerdo haberle escuchado alguna vez al gran astrólogo colombiano Mauricio Puerta que “uno no se hace famoso profetizando sobre lo ya acontecido, pero en cambio se aprende mucho del tema; Como el médico legista que en la morgue diseccionando el cadáver del muerto puede decir luego cuándo, cómo y porqué falleció el sujeto”. Algo que ya le había oído decir también años atrás a Galo Lasso, eximio astrólogo ecuatoriano lamentáblemente fallecido a finales del año pasado. Galo residía desde hacía más de 50 años en Colombia, y su deceso ocurrió lejos de su patria ecuatoriana y de éste su país adoptivo. Era no sólo un extraordinario e inigualable conocedor de la ciencia de los astros, sino poseedor de una vasta erudición y sabiduría en todos aquellos saberes denominados con el rótulo de místicos y esotéricos. Se ocupaba en ésta y aquellos por pura vocación, no como profesión o medio de vida, ni jamás cobró estipendio alguno por los invaluables servicios que siempre, solícito, prestó a quienes acudían a él en busca de orientación y consejo; Tampoco pretendió ningún tipo de figuración o notoriedad pública, que la amplitud y profundidad de sus conocimientos bien ameritaban, y así se perdió un genial astrólogo para el mundo. Prefirió mantenerse en el prudente y austero anonimato de una vida simple y tranquila, sirviendo, eso sí, con desprendimiento absoluto a quien lo necesitara.
“con la predicción”, me decía Galo, “lograrás renombre, aunque sólo sea por los continuos e inevitables desaciertos y equivocaciones a que todo astrólogo está sometido; en cambio, ‘leyendo’ cartas, no conseguirás esto pero aprenderás muchísimo y rápido, además que tendrás la comprobación directa de la real incidencia de las energías astrales”. Verdades de Perogrullo, pero muy a menudo olvidadas o dejadas de lado presuntuosamente por quienes hacen este tipo de declaraciones. Ciertamente, hace falta en estos tiempos un nuevo Gauquelin que con todo rigor metodológico -así haya quienes con desdeño se mofen del ‘método’ en astrología-emprenda el ímprobo trabajo de confirmar o negar de manera categórica y contundente, a la luz de las estadísticas, la acción-en un sentido u otro-de estas fuerzas.
Puntualmente, con relación a la Luna negra, el de Sharon Tate es un caso bien representativo de la influencia funesta de Lilith conforme a los diversos pero correlativos significados que se le atribuyen, tal y como se desprende de la enorme cantidad de literatura (libros, artículos, ensayo,etc) sobre el tema dispersa aquí y allá. Haciendo una síntesis de todo ello, y seleccionando los conceptos y ideas que mejor definen este peligroso personaje astrológico, sobresalen con caracteres destacados en este siniestro dossier las aberraciones sexuales, el sadismo, los instintos bestiales, la animalidad, la crueldad, el infanticido, la brujería, el satanismo, el crimen ritual, rasgos inconfundibles de Lilith.
En la madrugada del 9 de agosto de 1969 un grupo de jóvenes hippies dirigidos por el sicópata Charles Manson, bajo los efectos del alcohol, el LSD y otros tipos de alucinógenos irrumpieron en la mansión de la Tate, ubicada en Cielo Drive 10050, Beverly Hills, y luego de someterla rápidamente a ella y a tres de sus amigos que la acompañaban en ese momento, procedieron a asesinarlos de forma brutal y escalofriante, en lo que fue calificado-dadas las circunstancias del hecho- como un crimen ritual de carácter satánico.
Sharon, con un embarazo de 8 meses, pendía bamboleante de una cuerda de nylon, colagada por el cuello y abierta en canal. Prácticamente le habían vaciado el vientre. Del otro extremo de la cuerda colgaba Jay Sebring, un conocido peluquero que trabajaba en EE.UU. y en Londres; tenía la cabeza cubierta con una capucha negra y tras él, en la pared, escrito con sangre, la palabra“pig”. La banda de asesinos actuó bajo las órdenes de Charles Manson, un exconvicto con un largo prontuario de experiencias delictivas a través de las drogas, el alcohol, el vandalismo, las violaciones, la prostitución, etc.
CHARLES MANSON, EL MESIAS DEL DIABLO
Una somera reseña biográfica nos informa sobre este criminal lo siguiente:
“Nació el 12 de Noviembre de 1934 en Cincinnati, Ohio. Fue en la cárcel, a lo largo de los años 50, donde tomó contacto con las virtudes del esoterismo, y algo, en su desquiciada cabeza, pareció perder el rumbo definitivamente. Durante años estudió la Biblia y cuantos textos sagrados de diferentes religiones caían en sus manos, hasta que en 1967 salió de la cárcel. En aquellos más de diez años entre rejas había concebido la loca idea de que el fin del mundo de acercaba, y creía ver señales de ello en todas partes. Pronto comenzó a considerarse como la reencarnación de Satanás e incluso de Dios.
En San Francisco creó un grupo llamado “La Familia” en el que incluyó a jóvenes marginados como él, cuyas vidas estaban perdidas en el mundo del LSD y los alucinógenos, y empezó a impartir sus creencias. Aquella secta iba ganando adeptos día a día bajo la tesis de que había llegado el momento del Apocalipsis. La raza blanca sería destruida por los negros, pero éstos, siendo como eran una raza inferior-según sus extravagantes teorías-se encontrarían perdidos. Y ahí es donde aparecía su grupo, pues ellos serían los elegidos de guiar al mundo hacia un nuevo orden. Habrían de ser 144.000 los elegidos que, escondidos en un mundo subterráneo al que Charles Manson denominada Agartha, aparecerían un día para dirigir a todos los supervivientes.
En su esquizofrénica y descontrolada cabeza, Charles Manson creyó ver en la portada del disco de Los Beatles, Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band, y en la figura de Aleister Crowley, esa señal que esperaba”.
En astrología, la Casa XII es el sector del zodiaco que se atribuye a los grandes infortunios, tragedias, desgracias y fatalidades de la existencia; Las penas, pruebas y tribulaciones de todo tipo tienen su escenario en este lugar infausto; Es el área relacionada con el karma personal, social y familiar (de la herencia ancestral éste) producto de nuestro libre albedrío: la conducta y acciones negativas de vidas pasadas, generadoras de efectos y consecuencias inevitables e ineludibles, que auguran toda suerte de situaciones y sucesos infelices, desgraciados, trágicos y dolorosos como la miseria, la enfermedad, la cárcel, el hospital o el cementerio. A la luz de estas verdades astrológicas, el crimen de la celebridad hollywoodense, según se desprende de todos los detalles y circunstancias que lo rodearon y la forma como fue planeado y ejecutado corresponde indudablemente al ámbito de esta mansión astrológica, ocupada por la conjunción Júpiter/ Luna negra, en que ésta última dejó sentir su fatídico efecto maligno en desarrollo de los horrendos acontecimientos que se desencadenaron en la residencia de la actriz, como se verá a continuación.
Decíamos que en el cielo natal de la estrella de cine observamos la presencia en XII de Júpiter (18° 24’ de Cáncer) en conjunción con Lilith (16° 46’ de Cáncer).
Esta posición del regente de Sagitario, según las observaciones estadísticas de Gauquelin, es común en actores, y la XII, en otra de sus regencias, es la Casa del cine, por su relación con Piscis y Neptuno sus dueños naturales, análogos a la fantasía, la imaginación y todo aquello que nos evade de la realidad, como el cinematógrafo.
Lo interesante sería develar y comprender qué sentido encierra, en último término, la presencia de esa rara y extraña configuración en esta domificación tan compleja. Si como se dice, Júpiter en esta ubicación es protector-máxime que también está en conjunción con el ascendente-, ¿porqué ocurrió esta espantosa tragedia?, ¿Qué tenebroso secreto final podría ocultar sobre su vida?.
Antes de intentar especular en descubrirlo, digamos también que la XII está asociada a la gestación (recordemos que Sharon estaba embarazada), representa el seno materno, a diferencia de la V (la concepción), en que dejamos fluir nuestra energía para crear, bien sean hijos de la carne o del espíritu (nuestras obras intelectuales).
Si el ascendente marca el punto del nacimiento, la XII es la etapa previa, es decir, la vida intrauterina; Es la matriz universal, cuya contrapartida es el vientre materno; Son las aguas del caos cósmico en donde todo se encuentra en estado potencial y germinal, y de lo que todo emerge; el liquido amniótico donde nos movemos y tenemos nuestro ser antes de venir a la existencia; Es el embarazo, la preñez, reflejo de esos procesos que se desarrollan en lo oculto y secreto. Según la astrología kármica, gobierna los 7 primeros años de vida, incluida la etapa fetal.
Desafortunadamente, en el mapa natal de la actriz, aparecen Lilith y Júpiter en el maternal signo de Cáncer, y la Luna negra es contraria a la maternidad; Dada su indudable relación con lo femenino, no es casual que su tránsito por cada signo del zodiaco demore 269,3 días o 9 meses, igual a la duración del estado de gravidez, pero está ligada a una parte oscura, triste, de esta función. Son innumerables los casos en que una Luna negra en la Casa V, por ejemplo, es indicativa de abortos, cuando no de pérdida temprana de algún hijo o la imposibilidad de tenerlo. Para la fecha de los hechos se producía su retorno en conjunción exacta a su posición natal en Casa XII, activando algunas de las malas configuraciones que ya apuntaban desde el rádix a la muerte de la diva y su bebé en formación; además, por derivadas la XII es la VIII de la V, es decir, la muerte de los hijos.
EL ASESINATO DE SHARON TATE
La muerte de la actriz y su bebé está figurada por los siguientes malos aspectos radicales, delineados en negro:
El ascendente (21º 28’ 8’’, Cáncer) quincucio con Venus en 20º 43’ 0’’, Acuario, (0º 45’ de orbe), Casa VIII; Luna Negra en 16º 46’ de Cáncer, Casa XII (enemigos ocultos) semicuadratura Urano, regente de VIII, en XI, grupos (La pandilla criminal); Marte en 28º 40’ de Sagitario, Casa VI, quincucio a Urano (regente de VIII) en 0º 40’ de Géminis, Casa XI (grupos).
Acuario en la cúspide de VIII indica muerte sorpresiva e inesperada. Venus en VIII está dispuesta por Urano en XI (grupos, amigos), y su muerte se produjo a manos de una mujer del grupo de delirantes seguidores de Manson. Susan Atkins, quien apuñaló y asesinó a Sharon era de signo Tauro (Venus); Fue una muerte violenta pues Marte en VI (asaltos, heridas, según la astrología hindú) está en quincucio con Urano, regente de VIII; Un asalto realizado por enemigos ocultos (Júpiter en XII, dispositor de Marte en VI, Sagitario). Evidéntemente, el grupo de criminales irrumpió sorpresivamente (Urano) por asalto en la residencia. Marte, a su vez, rige las armas blancas y todas las víctimas fueron heridas y acuchilladas horriblemente. La muerte en iguales circunstancias del hijo que esperaba, porque Marte regente de V (Escorpión), hijos.
Tránsitos 9/8/1969
Como fue anotado, Para la fecha de los hechos se concretaba el tránsito de retorno de Lilith (16°41 de Cáncer) en conjunción exacta a su posición natal en Casa XII (16°45’), activando algunas de las malas configuraciones que ya apuntaban desde el rádix a la muerte de Sharon y su bebé en formación, produciéndose el execrable infanticidio y su propia muerte motivada por los oscuros instintos y retorcidas pasiones (Luna Negra) de la banda de hippies drogadictos y criminales; pero ese tránsito de Lilith también forma conjunción cercana con Júpiter Rx (18°23’ de Cáncer). La combinación de Júpiter con ese punto energético corrupto y maléfico, en un nivel, explica el exceso (Júpiter) aberrante de crueldad, sevicia, sadismo y bestialidad (Luna Negra) empleados en la comisión del asesinato múltiple. Susan Atkins, quien mató directamente a la Tate, declaró que “había sido la experiencia sexual más excitante de su vida”. Concordante con esa infame declaración, nos encontramos aquí con esa dualidad de placer (Júpiter) y dolor (Luna negra) que acompaña a la sexualidad morbosa (Luna negra), un tema de profundas raíces sicoanalíticas. Como esa conjunción también personifica a sus enemigos ocultos (Casa XII), describe perfectamente bien el placer (Júpiter) que experimentó la asesina con el sufrimiento (Luna negra) de sus víctimas. Vemos aquí paténtemente confirmado cómo esos aspectos oscuros y patológicos de la naturaleza humana (Luna Negra) que inclinan a los peores excesos y bajezas, tienen un sustrato sexual innegable. Y ya que hago alusión a los enemigos ocultos (Casa XII), es importante destacar que el clan de hippies que sacrificó a la estrella era conocido como ‘la familia Manson', y la conjunción siniestra ocupa el signo de Cáncer (asociado a la familia), regente de ese sector zodiacal en el esquema de nacimiento de Sharón.
(Continúa)
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