Header Ads

LA LUNA NEGRA EN LA CASA II, LA PASIÓN POR EL DINERO


Una natividad es una fuente abundante de información-en una escala inimaginable- sobre todos los asuntos que conciernen al individuo. Naturalmente, esa información viene codificada, por así decirlo, y a lo largo de los siglos se han sistematizado reglas y aforismos que nos permiten tener acceso a ella. Muchísimas veces -no todas- esas reglas se cumplen  de  manera exacta, pues al fin y al cabo hay que tener en cuenta con cuales cuestiones están relacionados los factores astrológicos en un esquema natal dado, siguiendo esa teoría de las determinaciones astrológicas magistralmente desarrollada por Morin De Villefranche. 
Con la finalidad de comprobarlo en una natividad concreta, tomo como ejemplo de muestra uno vinculado con la Casa VII, y es el muy puntual que -siguiendo el juego de las regencias y posiciones locales planetarias- nos habla de la presencia del señor de la Casa VII (matrimonio) en la VIII como indicador de posible muerte de la pareja, lo que en tal caso augura para el nativo ser beneficiario potencial  de la masa hereditaria de su conyuge, pues la casa VIII es por el sistema de casas derivadas la II (capital, bienes) de VII (socio matrimonial), de lo que se infiere lógicamente la muerte de éste, además de que el regente de VII (pareja) en VIII (herencias) significa con toda propiedad que éstas (las herencias) tienen su causa en la VII (la pareja), y se desprende de ello que este derecho se origina en la Muerte de su compañero matrimonial.
Pues bien, un caso representativo es el de Jackeline Bouvier, glamorosa miembro de la alta sociedad neoyorkina, esposa, primero, del carismático y popular presidente norteamericano JFK Kennedy, y después, en segundas nupcias, del magnate naviero griego Aristóteles Onassis.
 

Jackie, como era cariñosamente llamada, nació el 28/7/1929, 2:30 PM, en Southampton, Nueva York. 

En el rádix encontramos a Venus, regente de VII (la pareja) en VIII (la muerte); Venus está alojada en Géminis, signo del presidente asesinado, y formando oposición con Saturno en II, muerte (VIII) de VII (la pareja), y el temible astro es regente de Capricornio, signo de Aristóteles Onassis, su segundo esposo; Ahora bien, Lee Harvey Oswald, el presunto asesino de JFK, era nativo de Libra (Asc de Kennedy), signo regido también por Venus, y éste planeta, gobernante de VII (socio matrimonial), con presencia radical en VIII (la muerte), también domina la Casa XII (los complots, las conspiraciones y las tragedias inevitables de la vida). John Kennedy había nacido el 29 de mayo de 1917, en  Brookline, Massachusetts. Venus en VIII se encuentra en aspecto de cuadratura con Marte en el sector X, indicando la muerte violenta y pública de su marido por arma de fuego (Marte).

Es de destacar que el astro de la muerte y la violencia señorea la VI, enemigos ocultos, conspiraciones (XII) de VII (pareja), por casas derivadas. Precisamente, el día de la violenta muerte del mandatario estadounidense (22/11/1963), Venus, señora de VII, transita en conjunción íntima (0°54’14’’ de orbe) con Marte celeste por la Casa II, y en oposición a su punto radical en VIII. Por casas derivadas la II es la VIII (muerte) de la VII (pareja), en este caso, a mano de un enemigo oculto de su marido (Marte regente de VI derivada).
Continuando con el Venus de la natividad de Jackie, por regencia y determinación local, está relacionado no sólo con la muerte, sino también con las HERENCIAS (Casa VIII) y recursos económicos y posesiones de la pareja (la VIII es la II de VII), y la ambiciosa y glamorosa señora de la elite del Jet Set mundial recibió una millonario legado del dinero y los bienes, tanto de JFK  como de Aristóteles.
En efecto, unos cuantos años luego de la muerte de Kennedy, Jacqueline contrajo nuevamente matrimonio con el multimillonario griego Aristóteles Onassis, nacido el 20/1/1906 en Esmirna, Turquía, quien amasó una inmensa fortuna trabajando en la industria naviera como armador. Si algo se puede afirmar con total certeza acerca del matrimonio de ‘Ari’ y ‘Jackie’ es que no fue un matrimonio por amor, pero sí de mucha pasión…de muchísima pasión calculada al dinero de Aristóteles…!!. En ese sentido, y como evidencia inequívoca de la astrología, Jackie tenía la Luna Negra en la Casa II (Capricornio), signo que rige las ambiciones, y del cual era nativo Aristóteles …
El día del matrimonio de la nueva pareja del ‘jet set’ internacional , Venus, regente de VII, y que viene de VIII, está transitando en 29° 28’ de Escorpio (grado de pérdida), Casa I. Bien dice el dicho que “matrimonio y mortaja del cielo baja”, y primero que ella murió el rudo archimillonario griego; asimismo, viniendo de Capricornio en II, la Luna Negra (pasión al dinero del capricorniano Aristóteles), está pasando en tránsito de conjunción sobre Jupiter Rx en VII, siendo el olímpico Zeus regente de II, un guiño astrológico inequívoco de un gran matrimonio motivado por una oscura y secreta pasión económica, porque Júpiter tambien favorece los oscuros deseos ocultos de las personas, así sean bien materiales y concretos, como lo indica esa posición radical de Lilith en Capricornio. Veamos:


En el horóscopo de Jackie, Saturno Rx en II (muerte de la pareja) está en oposición a Venus Rx (dueña de VII) en VIII (la muerte). Este aspecto es bien indicativo de los posteriores pleitos legales (Casa VII) que tuvo que afrontar Jackie con la hija de éste, Cristina, por la incalculable herencia (Casa VIII) que dejó Onasis: Venus Rx en VIII (muerte, herencias) también rige la XI, que por derivadas  es la V de la VII, los hijastros, y está en oposición, como ya se dijo,  a Saturno Rx en II (dinero).
El multimillonario y Jacqueline tramitaban su divorcio cuando le sobrevino la muerte, con los consiguientes problemas legales por el dinero de éste, acontecimientos todos que se explican claramente por el tránsito de Saturno en VIII (la muerte, herencias). Saturno es la ley, el karma, lo que trae el destino, y además, rige  a Capricornio (Onassis).
Tránsitos Muerte de Onassis, 15/3/1975

Que Jacqueline haría el gran negocio económico de su vida al casarse con el millonario extranjero se aprecia en su cielo natal por la presencia de jupiter en VII (pareja), regente de II, dinero. 
Para comprobarlo miremos las progresiones de su carta para esa fecha mortuoria.

El ascendente progresado en Sagitario, Casa II, se encuentra en conjunción exacta a Saturno Rx. Vemos, pues, que la señora Jacqueline Onassis se encontraba en esos momentos bien enfocada, preocupada y seriamente concentrada en la parte económica, y ciertamente se iban a concretar esos objetivos, estas aspiraciones personales de una ambiciosa expansión económica, porque al mismo tiempo, Júpiter, el planeta de la suerte, la buena fortuna, la abundancia, la prosperidad y el crecimiento, y dueño del sector (II), arribaba a la conjunción con la cúspide de la Casa VIII (herencias), progresando justamente desde VII (matrimonio). Doña Jacqueline recibió, por supuesto, una gran herencia como resultado de su boda con Onassis. 
Alan de Los Mares 
Bogotá Colombia

PD: Re-editado el 16 de noviembre del año 2016